Missa Antimanta, una manera de expresar en escritura las pronunciación en que se denomina una mesa utilizada en Los Andes para poner objetos sagrados y los sacramentos medicinas de la tierra.
Hay bastante información para encontrar en distintas páginas, aunque yo prefiero contar mi vivencia y luego junt@s podemos hacer un resumen que trate de definir aquello que no tiene nombre. Quizás logremos consensuar una manera común de referirnos y entender una herencia fenoménica cultural que se levanta el territorio del Sur Central de América Nativa.
Quizás contra toda corriente educativa, yo me voy a jugar por traducir Missa a Mesa, aunque ambos conceptos están muy bien ligados. Como podemos ver en la fotografía, que expone un día en la comunidad de Japu Llanaruma uno de los anexos de Nación Q'eros, el alimento sagrado de la papita no se pone en cualquier espacio, sino más bien en un Aguayo que es el manto tejido grande y luego sobre una Uncuña, que es el manto tejido pequeño. Basados en esta observación y como premisa del rito diario de comer es que mi definición anti-definitoria postula que todo lo proveniente de la madre tierra y cuyo destino es ser entregado a un otro para entrar al mundo interior a través de la boca, requiere ser cuidadosamente presentado y que aquella presentación tradicional es un puente sagrado entre la madre dadora de vida y nosotr@s sus hij@s.
Más allá de la pretenciosa búsqueda de explicaciones acerca de prácticas chamánicas, que por lo demás no existen como tal en Los Andes Ancestrales sino más bien provienen del mundo Siberiano, Oriental y/o Mongol, la Mesa Andina o Missa Andina es la expresión del rito diario de nutrirnos y los aguayos de alguna manera es el puente sagrado con la Madre Tierra, según mi observación. De esta manera dejo la pregunta ¿Dondé y cómo aprender de la Missa Andina, quienes son los maestros o maestras de este legado cultural, tan apetecidos por el deseo pretencioso de querer portar un bulto ancestral?
Para mí, la respuesta es que el oficio se enseña en casa, en nuestras prácticas diarias, compartiendo, llevándonos el cariño de quien nos prepara un alimento y el trabajo de quien lo cosecho.
Todo portador o portadora de Missa Andina tradicional y originaria a visto en su huasichay (casita) desde el inicio de su conciencia, esta manera tradicional de comulgar con lo sagrado.
Nota del párrafo anterior, ¿Cuál es el oficio que aprendiste en la mesa de tu casa? y ¿Cómo lo estas llevando hoy?, dejo estas preguntas, ya que el mío fue el comercio y me doy cuenta que mi manera llevar la Missa Antimanta es justamente como lo hace un comerciante, yendo de un lugar a otro observando donde esta la necesidad que pueda yo satisfacer con dinero o sin dinero.
El oficio sagrado va de la mano del don, del talento y puesto en una Uncuña y en un Aguayo, hará de tu caminar y de portador@, un oficio sagrado original. único e irrepetible.
Si bien en mi experiencia me toco conocer el rito de la missa andina compartiendo en comunidad, caminando por las alturas de Los Andes, entre Apus y Cochas, comiendo un cocadito de papa y carne de llamita seca y pichando la Kintu Kuka para tomar la fuerza necesaria que nos permitía la peregrinación a las altas blancas Nieves del Glaciar de las Estrellas, hoy puedo reconocer las diferentes escuelas que se han levantado tras el pulso de vida con que la cultura originaria de nuestras montañas del sur ha despertado hacia el mundo.
Aunque reconozco esta escuela, no descartaría para nadie y recomiendo para tod@s vivir la experiencia de impresionar en nuestro corazón momentos sagrados de vivir en Ayllu junto a estas y estos bellas y bellos maestros y maestras.
Transformemos una Cosmovisión en Cosmovivencia, como aprendí del querido chasqui Delfor y de Bacilio Sea, ambos portadores de la tradición originaria y quechua hablante, que por cierto aprovecho de agradecerles por su generosidad al compartir sus saberes y prácticas.
LO SIMPLE DIFICULTA, LO COMPLEJO FACILITA
Me mando esta frase proveniente del mundo sistémico, para que puedas complejizar tu altar o mesa (lease la diferencia en otra entrada), la cosmovivencia y la vivencia que cada quien va teniendo, va siendo expresada en tu altar o mesa y desde ahí puedes moverte en los mundos mágicos y de poder que has vivenciado.
Así la Missa Antimanta o Mesa Andina va tomado un pulso original proveniente de la impresión originaria guardada en nuestro corazón. ¿Qué vas a poner en tu mesa? ¿Qué vas servir a tus invita@s? ¿Qie has cosechado y qué ahora tienes para compartir? ¿Cuál es la impresión que nutre la fuerza de tu Saminchar? ¿Cuál es el espíritu pallay de tu mesa? Bueno, te invito a seguir construyendo junt@s una mirada que permita ordenar la fuerza que brota del despertar del Condor al mundo, te invito a instruirnos junt@s en los Andes Ancestrales, te invito a descubrirte en la Missa Andina Antimanta.
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